Por Mariam Ludim Rosa Vélez
Al principio del 2013, tal vez finales del 2012, decidí comprarme un perfume. Una misión bastante difícil para una nariz sensible desde el nacimiento. He pasado periodos largos de mi vida sin usar perfumes por los constantes episodios de alergias, rinitis y sinusitis (o todas las anteriores). Fue así que cuando busqué en las tiendas especializadas la fragancia floral clásica Je Reviens de Worth, que había usado con éxito en el pasado, me enteré que ya no estaba disponible en el mercado local. Entonces sometí a mi nariz a la ardua tarea de escoger un aroma que ella pudiera tolerar y resistir; y que a su vez fuera agradable. Una amable empleada me ayudó con la fragante misión. De cuando en cuando me daba a oler unos granos de café por sus propiedades de neutralizar las narices fatigadas de múltiples esencias. Fue así que me presentó el Baby Tous for Woman, una fragancia muy suave basada en flores y frutas; y sí, huele a bebé. Fui fiel en mi aspiración de usar perfume en el 2013, de hecho, el envase está llegando a su final. Sin embargo, tan pronto me lo aplicaba el aroma se iba, pensé que era la química de mi cuerpo, hasta que recientemente leí revisiones del producto de otras personas que experimentaron lo mismo. De hecho, durante ese año una sola persona notó mi perfume y es porque me lo acaba de aplicar. Entonces, ¿estuve alguna vez perfumada?
¡Qué gran resolución, estar perfumada! (Ahora corresponde una gran carcajada).
Un perfume no me define, me definen esas características que brindan fragancia a mis entornos diarios. El perfume más poderoso y con un olor aceptado universalmente es una buena actitud. Toma tu frasco llamado Yo y mezcla frescura, dulzura, afabilidad, jovialidad y serenidad. Luego, reparte tu aroma. Tu esencia se multiplicará, muchos lo notarán, y se animarán a compartir, a su vez, sus propias formulaciones aromáticas. Sé buen perfume de esos que crean buenos recuerdos y que marcan vivencias. Si acaso tu nariz se fatiga alguna vez o detecta algún hedor -de esos que provocan las malas actitudes- aspira unos granitos de café y sigue firme en tu fragancia positiva. Es un buen día para perfumar.
Me encanto (y me dio risa). Lo comparti en Facebook. Me acuerdo muy bien de tus «issues» con tu nariz :-). Muy linda la aplicacion.
Gracias por visitar mi blog. Mis issues con la nariz siguen, aunque no son tan graves como en la infancia y primera juventud. Debo confesar que no tengo tan buena memoria como vos, pero sí recuerdo que algunas de mis amiguitas tuvieron que dejar de usar perfume por solidaridad a mí. Gracias por compartirlo. Un abrazo. Mariam Ludim
Me ha gustado mucho. Lo quisiera compartir